lunes, 5 de enero de 2015

MIS TEXTOS: "Un milagro"

















Me parece divertido, y hasta tierno, observar a mi madre y a mis hermanas frente a las pantallas del televisor prendidas de  aquellas series que tienen como tema principal los milagros. Los santos son uno de los principales conflictos de mi fe y sin querer he aprendido ya el nombre de algunos. Aunque si de milagros se trata  creo que también puedo referir alguno.
Los que conocen mi ciudad  saben que además de nuestra neblina, el smog y el ruido; nuestra ciudad se caracteriza por sus pistas y veredas rotas, las rompen la Municipalidad, la empresa de agua, la empresa de luz, se reparan y se vuelven a romper, algo así como uno de los castigos que aparecen en la obra de Dante.
Ante tanto hoyo y pista clausurada, los automóviles no tienen otra opción que buscar nuevas rutas. Esta lógica parece no funcionar con algunos “mototaxis”, unos pequeños engendros motorizados, mezcla de moto y carruaje antiguo, los cuales, aprovechando su maniobrabilidad y la falta de control policial, invaden las veredas.
Una tarde de verano, mientras aseguraba la puerta para salir a mi clase de idiomas, me percaté que uno de estos pequeños monstruos había invadido la angosta vereda y se dirigía directamente hacía mí, el vehículo ya  no podía frenar y menos virar en otra dirección, pues un jardín y grueso poste de luz le cerraban  el paso. No había tiempo para nada, ni siquiera para una oración o para pedir perdón por mis pecados, sólo atiné a cerrar los ojos. Y sucedió, mejor dicho, no sucedió, el vehículo pasó detrás  mío sin rozarme siquiera. ¿Creen que esto califica como milagro?
Ahora, además de ver a ambos lados de la pista, como me enseñó mi madre, saco la cabeza y veo a ambos lados antes de poner mis pies en la acera.

Beto


1 comentario:

Anónimo dijo...

Yo lo llamaría suerte ;)