jueves, 9 de diciembre de 2010

MIS TEXTOS: "LA FUGA DE LOS CACHORROS"

Los ladridos de los chacales hicieron reaccionar a Lobo, aquel corrió a la cueva. La entrada era muy estrecha, tuvo que arrastrarse para poder entrar. Allí estaban los lobatos, eran tres y le parecieron los cachorros más bellos que había visto, empezó a lamerlos, jamás había hecho algo así, por un momento, se vio junto a ellos corriendo en los bosques de Selva Nueva y escalando la Gran Roca. Nunca se sintió tan feliz.
¡Guau! ¡Guau! ¡Guau! Los ladridos se hacían más fuertes, los chacales ya estaban cerca. Lobo sacó lo más rápido que pudo a los cachorros, los chacales de seguro los matarían; los colocó detrás suyo y se preparó para luchar.
Zorro trato de buscar una salida, los chacales eran más pequeños, pero tan numerosos, la lucha sería desigual. En esta situación no cabían tretas ni engaños; no podrían esconderse, su olor los descubriría; tal vez podrían correr y escapar, pero con los cachorros la fuga era imposible: había que detener a los chacales.
—Llévate a los cachorros —se dirigió con suavidad Zorro a Conejo—. Hoy dormirás de nuevo en tu casa con tu esposa y tus hijos. Lo olvidaba, hazme un favor, dile a ese viejo Búho que pronto lo iré a visitar, tengo mucho que contarle. ¡Vete, amigo!
Conejo, habló con dificultad, su voz se le quebraba y sus ojos empezaron a arrojar gruesas lágrimas.
—¡Buuuuh! —gimió Conejo— Me gustaría quedarme con ustedes, pero sé que no podría ayudarlos. ¡Adiós, amigos! —de un brinco llegó a lado de Zorro y pegó fuertemente su cabeza a las patas del cánido. Luego salió corriendo dando un terrible grito—. ¡Cachorros, síganme!
Frente a ellos apareció la jauría, Zorro se unió a Lobo y juntos esperaron la acometida. Ahora debían demostrar que tan fuertes eran.
Lobo se alegró de tener a su lado a Zorro, había encontrado amigos y una familia. Pensó un momento en su amiga, la luna, y en lo hermoso que sería regresar con todos ellos a casa. Erizados los pelos, Lobo gruñó ferozmente, en aquel momento se le vio más fuerte y amenazador que nunca, giró la cabeza hacia atrás y vio a Conejo perderse en la selva con los cachorros...sus cachorros.

BETO

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